Tocarnos la cara es una de las peores cosas que le podemos hacer a nuestra piel. Usamos las manos todo el día para un montón de cosas, por lo que siempre están sucias.
Cuando nos tocamos la cara, pasamos toda esa suciedad directamente a la piel. Si tú también tienes esta mala costumbre, haz un esfuerzo consciente por dejar de caer en ella. Si te pica algo, ráscate con el interior de la ropa.
Pocos saben que lamernos los labios en realidad hace que se cuarteen. Esto puede parecer contradictorio de primeras, ya que es algo que hacemos con la intención de hidratarlos.
Si se te agrietan los labios, échate cacao o vaselina. Beber agua con regularidad también ayuda a mantenerlos hidratados.
Sabemos que no es fácil dejar de hacer esto, sobre todo si tenemos la vista cansada o sufrimos alergia. Pero lo cierto es que frotarse los ojos causa inflamación.
Esto se debe a que la piel que rodea a los ojos es muy delicada. En casos extremos, frotarlos con las manos puede incluso provocar conjuntivitis. Por lo tanto, si necesitas hacerlo, usa un pañuelo.
Sabemos que también es muy tentador, pero por más que creamos que eso los disimula, en realidad es justo al contrario.
Si quieres librarte de ellos lo antes posible, prueba a echarles un poquito de aceite del árbol del té para reducir la inflamación.
Atarnos el pelo con gomas es una de las peores cosas que podemos hacer, ya que este accesorio daña mucho el cabello.
Por suerte, la mayoría de personas está al tanto de esto y hoy en día existen más alternativas. Las gomas cubiertas de tela y las que tienen forma de espiral son buenas opciones.
Aplicar calor al cabello solo lo estropea, ya que hace que se seque y que las puntas se abran o se encrespen. Si puedes, deja que se seque solo.
Si no te es posible dejar que se seque solo, ponte un sérum termoprotector antes de secarlo, plancharlo o rizarlo para proteger las cutículas y darle un brillo saludable.
Solemos creer que cuanto más nos lavemos el pelo, más limpio estará. La realidad, sin embargo, es que con eso solo conseguimos privarlo de sus aceites naturales.
Si tienes el pelo corto, puede que no pase nada por lavarlo a diario, pero si te llega a la altura de los hombros, hazlo cada dos días (o cada tres si lo tienes aún más largo).
Aunque cueste creerlo, hay muchas personas que no lavan la funda de la almohada. Si no se hace, puede acumular restos de grasa, suciedad y maquillaje, lo que puede irritar la piel y hacer que te salgan granos.
Para prevenir esto, acuérdate de limpiarte la cara antes de ir a dormir y de echar a lavar la funda de la almohada al menos una vez a la semana.
Puede que este sea el hábito más difícil de superar, pero hay varias técnicas que pueden ayudarte a conseguirlo.
La primera opción es usar un esmalte repelente que haga que las uñas sepan mal para que así no te apetezca mordértelas.
También puede ser buena idea poner una barrera física entre tus uñas y tus dientes para resistir la tentación. Si hace frío, prueba a ponerte unos guantes.
Otra opción puede ser vendarlas cuando estés en casa por la tarde o cuando te vayas a la cama.
Aunque sea más fácil decirlo que hacerlo, intentar distraerte siempre que sientas la tentación de morderte las uñas puede ayudarte a superar este mal hábito, sobre todo cuando te sientas nervioso o aburrido.
También puedes masticar un chicle sin azúcar cuando sientas el impulso de morderte las uñas o jugar con una pelota antiestrés o un objeto similar que te ayude a distraerte y a mantener las manos ocupadas.
¡Otra forma de evitar la tentación es arreglarte las uñas para que así te dé pena estropearlas mordiéndotelas! ¿Por qué no pides cita para hacerte la manicura?
Si decides hacerte la manicura, escoge un color llamativo que no disimule los desperfectos (p. ej. rojo o rosa).
Aunque caiga de cajón, nunca está de más recordar que debes seguir una dieta saludable rica en nutrientes, vitaminas y minerales. ¡El calcio, el magnesio y los ácidos grasos son muy beneficiosos para las uñas!
Cuanto más duras tengas las uñas, más te costará morderlas. Lleva una dieta que incluya muchos huevos, pescado azul, fruta, verduras verdes y frutos secos.
Cuando están débiles, las uñas tienden a romperse. Si este es tu caso, córtatelas cada una o dos semanas para evitar morderlas.
Depende de la persona, pero si tienes las uñas cortas, puede que esto te ayude a resistir la tentación de hincarles el diente.
Si tienes las uñas secas y frágiles, es más probable que se rompan. Una buena forma de rehidratarlas es echarles una crema especial para uñas o cutículas.
Las cremas para uñas se aplican en la punta de la uña y las cremas para cutícula, cómo no, se masajean en la cutícula.
Fuentes: (WikiHow) (Bustle)
No te pierdas: Errores comunes de higiene que todos cometemos
Malos hábitos de belleza que debes dejar atrás ya
¿Haces alguna de estas cosas?
ESTILO DE VIDA Apariencia
Tenemos la falsa percepción de que debemos aparentar ser perfectos, un esfuerzo fútil en el que invertimos grandes cantidades de tiempo, dinero y energía. En realidad, con tan solo unos pequeños cambios podemos mejorar considerablemente nuestra imagen. ¡Y con cambios nos referimos a malos hábitos que deberíamos dejar atrás porque no nos hacen ningún favor! Si quieres saber de qué hablamos, ¡sigue leyendo!