Evita estos comportamientos antes de visitar al doctor.
Los baños de hielo son un tipo de crioterapia o terapia de frío que consisten en meterse en agua helada.
El frío extremo priva al cuerpo de calor y hace que la temperatura interna descienda, alterando así la circulación.
Algunas personas optan por sumergir tan solo algunas partes del cuerpo, mientras que otras más valientes se meten hasta el cuello o incluso del todo.
La inflamación es una respuesta natural a una herida o infección. Asimismo, cuando es crónica o prolongada, puede dar pie a enfermedades cardiovasculares u otros problemas de salud.
Es posible que las bajas temperaturas ayuden a disminuir la inflamación mediante la vasoconstricción. Cuando ocurre, la circulación disminuye y el proceso de curación comienza.
Los estudios que se han hecho sobre las duchas frías, una actividad similar a los baños de hielo, demuestran que estas pueden reforzar las defensas de los adultos sanos.
Según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, "las inmersiones repetidas en agua fría provocan escalofríos, los cuales aumentan a el índice metabólico y las concentraciones sanguíneas de catecolaminas, activando ligeramente el sistema inmunitario".
Sumergirte en agua helada puede tener muchos beneficios cardiovasculares. Cuando nos exponemos al frío de forma repentina, los vasos sanguíneos se contraen y se dilatan, lo que mejora la circulación.
Asimismo, con el tiempo, este "entrenamiento" del corazón y los vasos sanguíneos puede contribuir a la salud del sistema cardiovascular.
Existen muchos estudios que asocian los baños de hielo a una mejora temporal del estado de ánimo.
Se cree que meter la cara en agua helada activa el sistema nervioso parasimpático, lo que hace que el cuerpo se relaje tras un episodio de estrés.
El frío provoca escalofríos, lo que hace que el cuerpo genere un calor cinco veces superior al habitual.
Según un artículo publicado en 2022 en el International Journal of Circumpolar Health, los escalofríos aumentan el índice metabólico, lo que puede hacer que quemes más calorías en reposo.
Muchos deportistas recurren a los baños de hielo para evitar las agujetas y la rigidez muscular y así mejorar su recuperación.
Según un artículo de 2023 publicado en Sports Medicine, los participantes que se dieron un baño de hielo fueron capaces de bajar sus niveles de creatina cinasa, lo que se traduce en una posible reducción del desgaste y en un retraso de la aparición de las agujetas posentrenamiento.
Exponerse al agua fría también puede mejorar la sensibilidad a la insulina y, en última instancia, reducir la resistencia a la misma.
Los baños de hielo pueden ser un entrenamiento en sí mismos, ya que los escalofríos activan los músculos. También se han hecho algunos estudios a pequeña escala que demuestran que podrían ser útiles en el tratamiento de la diabetes tipo 2.
En 2022, la Asociación Estadounidense del Corazón publicó un artículo en el que se decía que el agua priva al cuerpo de calor 25 veces más rápido que el aire. Por lo tanto, aunque el agua no parezca particularmente fría, una persona puede sufrir hipotermia de todas formas.
La hidrocución es una respuesta corporal extrema a la bajada repentina de la temperatura de la piel.
Sumergirse en agua helada también puede provocar jadeo involuntario, respiración agitada e incluso hiperventilación debido al contraste repentino de temperatura. Esto puede dar pie a otros peligros como el ahogamiento si se traga agua por accidente.
Lo que está claro es que los baños de hielo no son para todo el mundo. Quienes tienen problemas de corazón deben ser especialmente cautelosos. Un estudio de 2022 publicado en el Journal of Medical Research descubrió que las personas con problemas cardiovasculares subyacentes corren un mayor riesgo si se sumergen en agua helada.
A medida que envejecemos, la grasa que hay por debajo de la piel disminuye y hace que nos cueste más mantenernos calientes. Por lo tanto, los baños de hielo son desaconsejables para los mayores.
Se recomienda empezar con tan solo 30 segundos de inmersión para observar cómo reacciona el cuerpo. Ve aumentando la duración de los chapuzones progresivamente hasta que seas capaz de aguantar varios minutos.
Actualmente no hay estudios que demuestren que sumergir la cabeza sea beneficioso. Si te decides a hacerlo, intenta protegerte los oídos para que no les entre agua, ya que de lo contrario te arriesgas a desarrollar una infección de oído.
No, los baños de hielo no son solo para deportistas. Aunque estos pueden beneficiarse particularmente de esta práctica, son muchas las personas que también pueden disfrutar de sus ventajas.
No hay pruebas de que sea perjudicial. Sin embargo, como ya hemos mencionado, si tienes una enfermedad o eres mayor, es mejor que no lo intentes.
Los baños de hielo aportan numerosos beneficios, pero no son una práctica que deba tomarse a la ligera. Lo mejor que puedes hacer es consultarlo con tu médico para saber si te convienen o no.
Fuentes: (Coldture Wellness) (EatingWell) (Mayo Clinic) (Healthline) (National Library of Medicine) (NPR)
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Inmersión en agua helada: así afecta al cuerpo y la mente
Estos son los pros y los contras
SALUD Baño de hielo
Los baños de hielo, como el propio nombre indica, son una práctica que requiere hacer inmersiones en agua helada. Se ha vuelto muy popular entre los gurús del fitness y el bienestar gracias a figuras como Wim Hof. Conocido por sus efectos positivos, este método promete un amplio abanico de beneficios tanto físicos como mentales, desde reducir la inflamación hasta mejorar el estado de ánimo. Sin embargo, también tiene un lago negativo. Entender los pros y los contras de esta práctica es esencial antes de lanzarse, literalmente, al agua. En esta galería exploraremos qué le ocurre al cuerpo cuando nos sumergimos en agua helada y sopesaremos tanto sus ventajas como sus desventajas. ¡Haz clic para seguir leyendo!